Soy Anamaris Ortiz Rodríguez, mentora en finanzas conscientes, creadora del método Happy Budget y fundadora de La Alcancía de Cristal, un movimiento que impulsa la educación financiera desde el hogar con propósito, alma y estructura.
Yo también crecí con una historia financiera que no me preparó para la vida.
Fui criada en una familia que me enseñó a esforzarme y a estudiar, pero nunca se habló abiertamente de dinero, inversiones o libertad financiera. Aunque tenía el perfil para ser "la profesional ideal", mi alma me pedía otro camino. Y lo seguí, aún con miedo, aún cuando mi mente me decía que me rindiera.
Conocí la escasez. Tomé decisiones desde la urgencia. Emprendí con ganas, pero sin estructura. Pero también desperté. Comprendí que los hábitos financieros se siembran en la infancia, y que nunca es tarde para sanar.
Después del huracán María, viajé a Miami, y mientras vivía allá ofrecía orientación financiera gratuita a familias. Un día me reuní con dos jóvenes universitarios. Uno no entendía conceptos básicos; el otro ya tenía instrumentos de retiro. ¿La diferencia? “Mis padres me enseñaron”, me dijo.
Esa frase lo cambió todo.
Me sumergí en el estudio del cerebro, el inconsciente, los hábitos y la infancia. Y entendí algo profundo: no educar financieramente a los pueblos es una estrategia del sistema.
Así nació La Alcancía de Cristal, primero como un podcast y luego como un movimiento. Hoy tengo claro que el dinero es la consecuencia natural de compartir nuestros dones con el mundo y vivir desde el propósito. Y eso empieza en casa.
Acompaño a madres que crecieron sin educación financiera a construir una nueva historia con el dinero. Creé el programa M.O.M. – Money over Myths, donde enseño a sanar la relación con el dinero, reconocer la personalidad financiera de sus hijxs y crear hábitos saludables en familia, paso a paso y con consciencia.
Mi enfoque no se trata solo de números: se trata de sanar. Integro educación financiera, crianza consciente, autoconocimiento y espiritualidad. Porque no basta con ahorrar si lo haces desde el miedo. Hay que transformar lo que aprendiste para no repetirlo en las próximas generaciones.
No trabajo desde la teoría. Acompaño desde la experiencia. Porque yo también pasé por ahí. Y sé que sí se puede.
Tu historia financiera no te define. Pero tu decisión de transformarla sí… especialmente si lo haces para que tus hijxs vivan una historia distinta.